Oh Dios, a ti dirijo mi oración porque sé que me responderás; inclínate y escucha cuando oro. Salmo 17:6 NTV
La oración debe ser parte de nuestra vida. Es una de las formas en las que podemos establecer una relación con el Señor, es el canal de comunicación directo con el Padre. Él siempre está para escucharnos, no necesitas hacer otra cosa más que hablar con Él. Expresar cómo te sientes, qué necesitas pero también, es expresar tu amor y adoración a Él. Las crisis son inevitables, estamos expuestos a vivir momentos difíciles, pero Jesús nos enseña en Juan 16:33 que confiemos porque él ya venció. A veces durante estos tiempos de dificultad no sabemos cómo orar o vemos la situación tan complicada que somos tentados a dejar de creer porque no vemos una respuesta pronto. Muchos de nosotros en este preciso momento necesitamos de la intervención divina para hallar la salida ante los problemas.
Dios nos dio armas poderosas, la oración y la palabra. Podemos tener una confianza absoluta de que cuando vamos en oración buscando su perfecta voluntad llegará la respuesta, el cielo y la tierra se unen para actuar a nuestro favor. Y estamos seguros de que él nos oye cada vez que le pedimos algo que le agrada; 15 y como sabemos que él nos oye cuando le hacemos nuestras peticiones, también sabemos que nos dará lo que le pedimos. 1 Juan 5:14 – 15 NTV
Pero ¿Cómo orar en tiempos difíciles? Debes conocer su palabra, cuáles son sus promesas, qué dice el Señor de ti y qué te pertenece. Efesios 6:17, nos dice que tomemos la espada del Espíritu que es la palabra de Dios. La oración y la palabra son armas espirituales que todo creyente debe utilizar en el día a día. Cuando tú conoces las promesas de Dios, tienes las palabras que necesitas para orar, es una manera de activar tu fe. El cielo se moverá a tu favor cuando tú te hayas movido en oración creyendo y declarando sus promesas. Mateo 16:19 Ora sin detenerte, esperando que lo imposible suceda, que el milagro ocurra. Porque nada hay imposible para Dios. Lucas 1:37 RVR Pues la palabra de Dios nunca dejará de cumplirse. Lucas 1:37 NTV
Déjate sorprender por la respuesta de Dios, siempre cumple su promesa, puedes estar seguro en su palabra mientras oras, Él tiene maneras creativas de hacer las cosas y responder las oraciones. Dios se ocupa de las cosas que te preocupan. Recuerda que sus promesas son inquebrantables, no tienen caducidad así que ora con fe creyendo que sucederá. Ustedes pueden orar por cualquier cosa, y si tienen fe la recibirán. Mateo 21:22
Por Soleida Hernández de Aburto